lunes, 31 de marzo de 2008

Robert Rauschenberg

Al Maestro con Cariño...

Robert Milton Ernest Rauschenberg
Pintor estadounidense. Desarrolló su formación en lugares muy diversos: Kansas City, París, Carolina del Norte y Nueva York. Tras un primer período pictórico que podría enmarcarse en algunas de las formas del expresionismo abstracto, en la década de 1950 empezó a realizar sus combine-paintings, piezas de difícil adscripción en las que combinó el lienzo con el ensamblaje de objetos dispares, en muchos casos de desecho: animales disecados, sillas, botellas, ruedas de coches, ventiladores, receptores de radios, etc. Desde 1963 ha recurrido también a la serigrafía, en la que se ha servido a menudo de fotografías y recortes de periódico. Fue uno de los fundadores de la EAT (Experimentos en Arte y Tecnología) y en 1964 recibió el Gran Premio de la Bienal de Venecia. Enmarcado en tendencias tan dispares como el expresionismo abstracto o el pop art, él mismo se ha autocalificado a menudo como «neodadaísta».





















representó un papel importante en la transición desde el expresionismo abstracto al Pop Art. Nació en Port Arthur, Texas. Estudió arte en París y en diferentes escuelas de Estados Unidos, incluyendo el Black Mountain College, donde tuvo como profesor a Josef Albers. Entre sus primeros trabajos destacan unas cajas que contienen cianotipos, pinturas en blanco y negro y algunos objetos. A principios de 1950 realizó pinturas collage, en las que los lienzos expresionistas libremente pintados fueron cubiertos con fragmentos textiles, fotografías y recortes de periódicos rasgados. En 1955 hizo sus primeras Asociaciones, ensamblajes tridimensionales en los que las pinturas se combinaron con imágenes encontradas, como fotografías y objetos de la cultura popular tales como señales de tráfico, focos, bombillas, botellas de Coca-Cola o aparatos de radio, que creaban unos efectos irónicos o ridículos. El más conocido de ellos, Monograma (1955-1959, Museo Moderno de Estocolmo), presenta una cabra disecada con un neumático a modo de imposible flotador. Estos trabajos híbridos, enfatizando los objetos fabricados en serie, tuvieron una fuerte influencia en el arte pop de la década de 1960. A partir de 1962, Rauschenberg experimentó con la estampación por serigrafía, primero en blanco y negro y más tarde en color, en la que la repetición de la imaginería tuvo un papel destacado. La mayor parte de su obra artística de las décadas de 1970 y 1980 la dedicó a los collages, las litografías y otras formas de las artes gráficas, incluyendo la fotografía. En 1981 aparecieron las Fotografías Rauschenberg.



fuentes varias, Gracias y Saludos

Darryl Pottorf...la fusión de la materia

Mágico Pottorf....

Pottof en el IVAM junto a Rauschenberg su Maestro

En 1976, Florencia acogió una exposición sobre la obra de Robert Rauschenberg, el artista al que hace cuatro años el IVAM galardonó con el Premio Internacional Julio González. Un joven de 24 años acudió a ver aquella muestra y quedó fascinado por la personalidad de aquel creador y por su obra. Poco después, Darryl Pottorf, que era el nombre de aquel estudiante de Cincinatti, comenzó a trabajar en el estudio de Roschenberg como asistente.hasta el 3 de Mayo de 2008 podemos ver una colección de 55 obras de producción reciente (2001-2007) de uno de los creadores americanos más influenciados por el arte europeo. Viajero infatigable, Pottorf ha recorrido diversos lugares de Europa para captar con su cámara aquellos rincones que le hechizan y tratarlos en sus peculiares obras. En la exposición que el 13-03-2008 abrió el IVAM, en la sala de la muralla.

La obra de Pottorf, una mezcla de "dulzura, corazón, confusión y misterio", según sus propias palabras, conecta la tradición del Renacimiento italiano con el action painting de la escuela americana, en la fusión de lo clásico y lo contemporáneo, a través de una técnica, inventada por él mismo, que combina pintura, dibujo y fotografía. Una técnica que conoció "por casualidad", después que un huracán, que asoló Florida, dejara algunos de sus lienzos sumergidos en agua durante tres días sin sufrir daños. A partir de esa experiencia, Pottorf descubrió que el agua podía conseguir el efecto que siempre había buscado en sus obras: el que le produjeron los frescos de la pintura renacentista en su primera visita a Florencia, el lugar en el que surgió su "verdadero amor al arte". Hasta entonces, Pottorf había trabajado con recubrimientos realizados con acetona, una sustancia tóxica altamente peligrosa, una muestra de los cuales también está presente en la exposición.



Gracias...y Saludos